El 10 tenía día de descanso como la mayoría de los que jugaron ayer, pero eligió apoyar a sus compañeros desde un costado. A su lado el infaltable Rodrigo De Paul. Las fotos de una hermosa mañana.
Después del desahogo a Argentina ya piensa en lo que viene. Todo el país respira aliviado pero para el plantel celeste y blanco la mente ya está puesta en el próximo choque ante Polonia el próximo miércoles 30 de noviembre a las 16.
Es por eso que el cuerpo técnico dispuso descanso para los titulares que jugaron ayer, mientras que los jugadores que quedaron marginados del segundo partido realizaron trabajos de activación y luego algunos movimientos con pelota. En este grupo también estuvieron Emiliano Dibu Martínez y Enzo Fernández.
Junto a ellos estuvieron Juan Foyth, Nicolás Tagliafico, Leandro Paredes, Nicolás Pezzella, Julián Álvarez, Cristian Romero, Exequiel Palacios, Ángel Correa, Thiago Almada, Alejandro Papu Gómez, Paulo Dybala, Nahuel Molina y los arqueros Franco Armani y Gerónimo Rulli. Todos se movieron al ritmo del preparador físico.
En el entrenamiento sin embargo también estuvo Lionel Messi, que no participó de la práctica pero se acercó a acompañar a sus compañeros y desde un costado observó los trabajos del grupo. A su lado estuvo su fiel amigo Rodrigo De Paul.
Una vez finalizados los ejercicios, el equipo tendrá tranquilidad para el resto del domingo, con una nueva visita de familiares. La idea es mantener el ánimo del plantel bien alto para encarar lo que se viene y tal como sucedió la semana pasada tras la derrota con Arabia, los seres cercanos de los jugadores son claves para que se respire alegría en la concentración.
El lunes volverá el trabajo con el plantel completo. Será a puertas cerradas y empezará a tomar forma el nuevo equipo que saldrá a la cancha, seguramente con más de una modificación.
