La sede diplomática fue cerrada 10 días antes de que las tropas rusas invadieran Ucrania.

Estados Unidos reabrió este miércoles su embajada en Kiev luego de tres meses, tras el cierre de la sede diplomática que se había dispuesto por la invasión rusa de Ucrania.

«El pueblo ucraniano, con nuestra asistencia en seguridad, ha defendido su patria frente a la invasión inconcebible de Rusia y, como resultado, las barras y estrellas vuelven a flamear sobre la embajada», informó en un comunicado el secretario de Estado, Antony Blinken, en alusión a la bandera estadounidense.

Y agregó: «Con orgullo estamos con el gobierno y el pueblo de Ucrania, y los seguimos apoyando mientras defienden su país de la brutal guerra de agresión del Kremlin».

El Departamento de Estado cerró la embajada en Kiev el 14 de febrero, 10 días antes de que las tropas rusas invadieran Ucrania, con el argumento de «desnazificar» las repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk, en guerra con el gobierno ucraniano desde 2014.

Los diplomáticos de Estados Unidos siguieron ofreciendo sus servicios desde la ciudad de Leopolis, en el oeste de Ucrania, a veces durmiendo en la vecina Polonia por motivos de seguridad.

El regreso a Kiev se produjo semanas después de que las fuerzas ucranianas derrotaran los esfuerzos rusos por hacerse con el control del norte de Ucrania y de la capital, y de que la guerra se centrara en el este y el sur del país.

«Al dar este paso crucial, implementamos medidas adicionales para aumentar la seguridad de nuestros colegas que están volviendo a Kiev y mejoramos nuestras medidas y protocolos de seguridad», finalizó Blinken.