Es garantizar “el acceso y comunicación de las personas sordas o hipoacúsicas a través de la lectura facial, gestual y de labios del interlocutor”.

Por insistencia legislativa; desde el viernes ya resulta obligatorio el uso de mascarillas, tapabocas o barbijos transparentes en todas las dependencias del estado provincial en la que se brinde atención al público, incluidas las instituciones educativas de gestión pública o privada en todos sus niveles, para garantizar así “el acceso y comunicación de personas sordas o hipoacúsicas a través de la lectura facial, gestual y de labios del interlocutor”.

Desde el pasado viernes 10 es obligatorio el uso de mascarillas, tapabocas o barbijos transparentes en todas las dependencias del estado provincial en la que se brinde atención al público, incluidas las instituciones educativas de gestión pública o privada en todos sus niveles.

Según precisa la ley, el objetivo es garantizar “el acceso y comunicación de las personas sordas o hipoacúsicas a través de la lectura facial, gestual y de labios del interlocutor”.

La norma, insistida por la Legislatura en la sesión del 2 de septiembre, establece que “cada oficina, organismo o dependencia que atienda al público debe contar con al menos 1 trabajador/a por turno o franja laboral que utilice mascarilla, tapabocas o barbijo transparente”, y que la provisión de esos elementos estarán a cargo del empleador.

Además,  invita a las instituciones privadas con atención al público; los municipios y al Poder Judicial a adoptar la misma modalidad, garantizando al menos el uso del barbijo inclusivo.

El ejecutivo había vetado el proyecto en cuestión, señalando que había poca existencia en mercado de ese tipo de artículos, su alto costo y la posibilidad de reemplazarlos con otro tipo de implementos, por ejemplo mamparas transparentes, que permitirían cumplir con el objetivo propuesto en la noma.